En la primera sesión te pregunto un poco sobre la relación que tienes con tu cuerpo y te propongo unos juegos o meditación según el ambiente del momento para crear una energía agradable.
Tu expresas y precisas cuáles son tus necesidades. Te voy a guiar durante todo el proceso con los juegos corporales o de relajación correspondientes.
El trabajo se puede hacer desnudo/a o con la ropa puesta. Yo te animo a probar la desnudez, el trabajo es mucho más eficaz. No obstante, iremos siempre a tu ritmo y es posible trabajar únicamente a partir de la expresión de la manos, o de la cara por ejemplo.
Lo primero es que entiendas y sientas el espacio interno que puedes abrir al ser mirado así: como un espejo limpio de juicios. Podrás sentir cambios profundos en tu interior.
Con algunas sesiones, es muy posible que tu entorno remarque más tarde o más temprano que algo a cambiado en ti: una forma de andar, de mirar, de actuar…
Puedes pedir trabajar sobre algo concreto que sepas que necesitas.
He aquí algunos de los temas más recurrentes: